miércoles, 10 de agosto de 2011

DIGNIDAD DE LA PERSONA

El ser humano ha sido definido en varios momentos del tiempo de diferentes maneras. Esas definiciones han ido cambiando con la evolución del conocimiento científico, la filosofía y la religión. Han pasado por definiciones como que el ser humano es un animal racional o una sustancia de naturaleza racional, hasta la siguiente definición que, a mi gusto, es una de las más completas:

"El ser humano es un ser espiritual en razón de su inteligencia, de su capacidad de amar, de su aptitud para elaborar conceptos inmateriales y abstractos, de su autoconciencia y subjetividad, de su búsqueda de trascendencia y de su tensión hacia lo infinito y eterno, y lo que lo distingue y diferencia de los otros seres espirituales es que vive su espiritualidad en, con y por medio de un cuerpo".


Esto es un ser humano dentro de una definición muy completa. Pero, ¿Cómo definimos a una PERSONA? Bueno, esta definición es la que más me ha gustado. Se las comparto:

"La persona es un compuesto individual de materia y espíritu, cuerpo y alma, dotado de inteligencia y voluntad, eminentemente relacional, perfectible, que se realiza en comunidad con los demás".

Son varios los conceptos que se manejan en esta definición y de mucha importancia. Se toca la individualidad de la persona, donde todos somos diferentes en accidente, pero no en esencia. Es decir, todos nos diferenciamos por nuestro color de piel, color de ojos, tamaño de nariz, etc., pero todos somos iguales en esencia. También se habla de la realización en comunidad, lo que quiere decir que la persona es un ser sociable, que vive en una sociedad y que su perfección y realización depende de su trato con sus semejantes próximos. Y otro punto muy importante es la palabra "perfectible", donde se define que el hombre puede mejorar continuamente de manera integral y así también lograr su propia realización.


Como cualquier ser, la persona se perfecciona por su realización integral, por realizar aquello que constituye su finalidad, es decir, aquello para lo que esa persona es. El tener esta capacidad de crecer y desarrollarse, hace a la persona merecedora de las condiciones necesarias para lograr esa realización sólo por el hecho de ser. Es exigente de tales condiciones y al mismo tiempo obligada a otorgarlas a las demás personas.

Es aquí donde entra el respeto a la DIGNIDAD DE LA PERSONA. Pues para respetar la dignidad de las personas es necesario que hagamos lo mejor posible para proporcionar las condiciones que permitan ayudar a su realización. Esto en lo individual y también en nuestra convivencia con la sociedad. Recordemos que la realización integral de las personas es patrimonio y obligación de todos los miembros del grupo.


La persona humana debe ser puesta como el centro mismo de todas las actividades humanas, pues del concepto y definición que tengamos de la persona depende nuestra idiosincrasia, nuestras acciones y decisiones.

Gracias.

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